Bienvenidos a la Librería
Anticuaria La Galatea nacida hace ya 19 años, y que, día a día, se esfuerza,
como sus propietarios, en acercar a todos sus clientes y amigos el mundo del
libro antiguo, creando un espacio de cultura y respeto a la lectura, la música
y al arte, pero conectado, desde el respeto a la tradición, con la modernidad y
las necesidades de un nuevo público que gusta impregnarse de belleza y
conocimiento.
Dicen que nadie puede
presumir de haber estado en Granada sin haber visitado la Alhambra, o en
Sevilla sin haber subido a la Giralda. Aunque no estoy del todo de acuerdo, creo
que perderse algunos de los tesoros históricos y artísticos de ciudades así tiene
poco sentido, pero el viajero es el que elige qué visitar y no seré yo quien
critique el proceder de nadie. Entre otras cosas porque una de mis aficiones
favoritas cuando visito cualquier pueblo o ciudad no es una afición común, he
de reconocerlo: visitar sus librerías.
Pero dejemos Granada y
Sevilla. Si desde la capital andaluza tomamos la Vía de la Plata, después de
pasar por las provincias de Sevilla, Huelva, Badajoz y Cáceres llegaremos a una
de las ciudades más bonitas del mundo: Salamanca.
No puedo negar mi
debilidad por la comunidad castellano-leonesa. En ella se encuentran algunas de
mis ciudades favoritas, como la propia Salamanca, Ávila o León. Hoy voy a
quedarme en la primera para continuar la serie de artículos que estoy dedicando
a sus librerías. Después de hacer una ruta por algunos de sus bares y de escribir sobre la Librería anticuaria y joyería de autor La Nave y sobre la Librería Mundus Libri, hoy es el turno de
recorrer una de las librerías más especiales que he tenido la oportunidad de
visitar: la Librería Anticuaria La Galatea.
Como no podía ser de otra
forma, se encuentra situada en pleno centro de Salamanca, a escasos
20 metros del Patio de Escuelas, la estatua de Fray Luis de León y frente a la
impresionante fachada de la Universidad. Un poco más allá, a escasos 100-200
metros a la redonda, se encuentran las Escuelas Menores, las Catedrales, la
Universidad, la Casa de las Conchas, la Clerecía o la Casa Lis.
Salí de la Librería
Mundus Libri y mientras recorría la calle Compañía me sentí extraño. No puedo
explicar qué me ocurrió, pero no era la primera vez que me pasaba visitando
lugares así. No sé si me sentía abrumado por estar rodeado de tanta Historia
(vivo en Sevilla, así que debería estar acostumbrado a eso) o simplemente los
efluvios de los libros viejos ejercieron un efecto hipnótico en mi cerebro, el
caso es que tuve que parar unos segundos y respirar hondo. En el fondo, creo que
lo único que quería era empaparme de aquello y disfrutar al máximo cada segundo
de mi estancia.
Pasé junto a la Clerecía
y giré a la izquierda por la Rúa Antigua (donde está el mítico The Irish Theatre,
cuyo nombre anterior, The Irish Rover, me gustaba bastante más), antes de
alcanzar la Plaza de San Isidro. Desde allí solo tenía que girar a la izquierda
para enfilar la calle donde se encuentra La Galatea. El nombre de la calle no
podía ser más apropiado: calle Libreros. En el número 28 se encontraba mi
objetivo.
Cuando giré la esquina y
observé el rótulo con el nombre de la calle, no pude resistirlo. Desenfundé la cámara
de mi móvil y disparé. Me encanta esta fotografía…
La fachada de piedra
propia de las edificaciones del centro de Salamanca recibe al visitante y le
invita a pasar a un pequeño pasillo, en el que observamos el primer cajón
repleto de libros. Llama la atención una pizarra en la que los responsables del
local han redactado las normas de acceso al mismo y cómo contactar con ellos a
través de las redes sociales.
Al llegar al recibidor
enseguida fui consciente de estar en un lugar especial. En la pared, bien
visible, el nombre de la librería, acompañado por varias vitrinas con, cómo no,
más libros. Una vez en el interior, puse en marcha el ritual: un primer repaso
de las estancias me descubrió un lugar que es mucho más que una librería. Es un
centro cultural en el que no solo podemos encontrar libros antiguos,
descatalogados, de segunda mano, libros firmados o cómics, sino también cedés
musicales, deuvedés de cine, discos de vinilo… y muchas cosas más.
Tras el primer repaso de
rigor, salí a la calle para indicar a mi mujer cómo llegar a la librería. Ambos
regresamos con la intención de disfrutar un rato más de aquel lugar y buscar
algún libro interesante que llevarnos. Pudimos conversar un rato con la
responsable de la tienda, Begoña, experta en libro antiguo, manuscritos, documentos
antiguos y grabados. Nos explicó cómo está distribuida la librería y su forma
de trabajar con los libros, culpable
en buena medida de que La Galatea sea un referente del sector.
Mi mujer eligió una
primera edición de Los raros, de Pere Gimferrer, y le echó el ojo a un precioso
volumen de Cuentos tradicionales portugueses (La Habana, Cuba, Editorial Arte y
Literatura, 1985), que terminó comprando unos días después.
Hay librerías con un
encanto especial y La Galatea es una de ellas. Dicen que nadie puede presumir
de haber estado en Granada sin haber visitado la Alhambra, o en Sevilla sin
haber subido a la Giralda. Aunque no estoy del todo de acuerdo, creo que nadie
puede decir que su estancia en Salamanca sea completa hasta haber visitado la
calle Libreros 28.
Calle Libreros, 28
C.P. 37008 - Salamanca (España)
Horario de apertura:
De martes a sábado de 10'30 a 14 y de 16'30 a 20 horas
Teléfono: 923269163
Correos electrónicos: info@lagalatea.es / lagalatealibros@hotmail.com
Web: www.lagalatea.es
Web: www.lagalatea.es
Facebook: www.facebook.com/LaGalatea
Twitter: @GALATEA_Books
2 comentarios:
Encomiable labor la de Ismael, que desde su blog ayuda a dar visibilidad a lugares tan relevantes para la cultura de nuestro país, como son las librerías.
Desde la Librería Anticuaria LA GALATEA, queremos agradecer especialmente este precioso recorrido que ha realizado por las librerías de nuestra ciudad, y MUY ESPECIALMENTE, por las preciosas palabras con que nos ha elogiado.
Gracias ISMAEL por ayudar a negocios que como el nuestro solo pueden sobrevivir gracias al apoyo de gente con esos preciosos dones que son la CURIOSIDAD y la SED DE CONOCIMIENTO...ah...y gracias por comprar libros, jajaja, que aunque vivimos de las palabras, necesitamos también que den dinero, jajaja...
Un cordial y afectuoso saludo.
Begoña y Angel.
Gracias a vosotros por estar ahí. Me gusta la lectura, me gusta la escritura, me gusta poner en valor de los libros, el material y el intangible; librerías como la vuestra condensan todo ese anhelo de curiosidad y conocimiento al que os referís.
Me encanta vuestra librería y espero volver pronto. Tal vez en noviembre...
¡Un abrazo!
Publicar un comentario