Francisco Ibáñez (2016)
Ediciones B
Francisco Ibáñez (Barcelona, 1936) es uno de los mejores (para muchos, el mejor) dibujantes de cómics de nuestro país. Creador de personajes irrepetibles como el botones Sacarino, Pepe Gotera y Otilio, Mortadelo y Filemón o la familia Trapisonda, el historietista catalán ha cumplido este año los ochenta y ha decidido, junto con Ediciones B, ofrecernos algunos de sus mejores trabajos, ya sea recopilación mediante o con nuevas aventuras de sus personajes más emblemáticos, Mortadelo y Filemón.
Para empezar, el pasado 2 de marzo se puso a la venta la edición integral de 13, Rue del Percebe. Ediciones B ha tirado la casa por la ventana para ofrecer un volumen de 345 páginas, dos kilos de peso, lomo de tela, tamaño XXL (23 x 33 cm), restauración de páginas originales y revisión de colores incluidos.
El volumen contiene todas las viñetas creadas por Ibáñez y publicadas en la revista Tío Vivo entre 1961 y 1968. Quién no ha disfrutado con las escenas protagonizadas por personajes tan variopintos como el moroso, la portera, la dueña de la pensión, el ladrón, Don Hurón, el tendero y el resto de personajes que se dejan ver en el mítico edificio creado por el catalán.
El cuidado por los detalles está presente en cada viñeta y son marca de la casa: el gato y el ratón, las arañas e insectos varios dotan a cada escena de una lectura más allá de lo que transmite el escenario principal. La restauración de los colores (13, Rue del Percebe solía publicarse en color pero ocasionalmente lo hacía en blanco y negro, por lo que se han coloreado por primera vez unas 45 páginas) permite disfrutar aún más de la creación de Ibáñez y evidencia un cuidado exquisito del autor y de la editorial por ofrecer un volumen con un acabado impecable.
13, Rue del Percebe vio la luz fue el 6 de marzo de 1961. 55 años después, el humor de Ibáñez mantiene su frescura y actualidad. Y para que no quepa la menor duda, el historietista barcelonés sigue publicando historias que demuestran que está al tanto de todo lo que sucede en España y en el mundo. Buena prueba de ello es el último volumen de las aventuras de dos de sus grandes personajes, Mortadelo y Filemón: ¡El capo se escapa!
La T.I.A. ha recibido el encargo de atrapar a Osvaldo Marijuánez, un peligroso capo de la mafia que se ha fugado de la cárcel a través de un túnel que habían excavado sus hombres. Mortadelo y Filemón serán los responsables de atrapar a este peligroso delincuente, que ya se ha escapado de varios penales, como Alcalá Moco y el de Villacascote, ambos de alta seguridad.
Para capturar a Marijuánez, los agentes de la T.I.A. tendrán que viajar a África, a Krakatovia (en Transilvania, donde tendrán un hilarante encuentro con un viejo conocido de largos colmillos), al hospital El suspiro alegre y a Bagdad, entre otros escenarios. Pondrán todo su empeño en atrapar al esquivo Osvaldo, pero no serán los únicos que sigan la pista al capo. El agente Selo Khome, del Tribunal de Indagaciones Ojeoauditivas (T.I.O.), se cruzará en su camino y no dudará a la hora de aprovecharse del buen hacer de los agentes de la T.I.A. para capturar al fugado.
Como en la mayoría de las aventuras de los agentes de la T.I.A., no faltan los castigos del superintendente Vicente, los disfraces de Mortadelo, los inventos del profesor Bacterio y demás clásicos. Las fugas de la cárcel del capo son muy originales y las situaciones en las que se ven envueltos Mortadelo y Filemón son de lo más surrealistas, algo a lo que nos tiene acostumbrados Ibáñez.
Se me ocurren pocas maneras más acertadas de celebrar un ochenta cumpleaños que demostrando estar en plena forma. Ese ha sido el empeño de Francisco Ibáñez y con la edición integral de 13, Rue del Percebe y ¡El capo se escapa! (más todo lo que vendrá), el historietista catalán confirma que le queda cuerda para rato. Y sus lectores nos alegramos por ello.
Para empezar, el pasado 2 de marzo se puso a la venta la edición integral de 13, Rue del Percebe. Ediciones B ha tirado la casa por la ventana para ofrecer un volumen de 345 páginas, dos kilos de peso, lomo de tela, tamaño XXL (23 x 33 cm), restauración de páginas originales y revisión de colores incluidos.
El volumen contiene todas las viñetas creadas por Ibáñez y publicadas en la revista Tío Vivo entre 1961 y 1968. Quién no ha disfrutado con las escenas protagonizadas por personajes tan variopintos como el moroso, la portera, la dueña de la pensión, el ladrón, Don Hurón, el tendero y el resto de personajes que se dejan ver en el mítico edificio creado por el catalán.
El cuidado por los detalles está presente en cada viñeta y son marca de la casa: el gato y el ratón, las arañas e insectos varios dotan a cada escena de una lectura más allá de lo que transmite el escenario principal. La restauración de los colores (13, Rue del Percebe solía publicarse en color pero ocasionalmente lo hacía en blanco y negro, por lo que se han coloreado por primera vez unas 45 páginas) permite disfrutar aún más de la creación de Ibáñez y evidencia un cuidado exquisito del autor y de la editorial por ofrecer un volumen con un acabado impecable.
13, Rue del Percebe vio la luz fue el 6 de marzo de 1961. 55 años después, el humor de Ibáñez mantiene su frescura y actualidad. Y para que no quepa la menor duda, el historietista barcelonés sigue publicando historias que demuestran que está al tanto de todo lo que sucede en España y en el mundo. Buena prueba de ello es el último volumen de las aventuras de dos de sus grandes personajes, Mortadelo y Filemón: ¡El capo se escapa!
Francisco Ibáñez (2016)
Colección Magos del Humor nº180
Ediciones B
Para capturar a Marijuánez, los agentes de la T.I.A. tendrán que viajar a África, a Krakatovia (en Transilvania, donde tendrán un hilarante encuentro con un viejo conocido de largos colmillos), al hospital El suspiro alegre y a Bagdad, entre otros escenarios. Pondrán todo su empeño en atrapar al esquivo Osvaldo, pero no serán los únicos que sigan la pista al capo. El agente Selo Khome, del Tribunal de Indagaciones Ojeoauditivas (T.I.O.), se cruzará en su camino y no dudará a la hora de aprovecharse del buen hacer de los agentes de la T.I.A. para capturar al fugado.
Como en la mayoría de las aventuras de los agentes de la T.I.A., no faltan los castigos del superintendente Vicente, los disfraces de Mortadelo, los inventos del profesor Bacterio y demás clásicos. Las fugas de la cárcel del capo son muy originales y las situaciones en las que se ven envueltos Mortadelo y Filemón son de lo más surrealistas, algo a lo que nos tiene acostumbrados Ibáñez.
Se me ocurren pocas maneras más acertadas de celebrar un ochenta cumpleaños que demostrando estar en plena forma. Ese ha sido el empeño de Francisco Ibáñez y con la edición integral de 13, Rue del Percebe y ¡El capo se escapa! (más todo lo que vendrá), el historietista catalán confirma que le queda cuerda para rato. Y sus lectores nos alegramos por ello.